La sudoración
es una función fisiológica natural y necesaria para nuestro organismo. Cuando sudamos:
- Eliminamos
sustancias de desecho y toxinas.
- Logramos
mantener el pH de la superficie corporal.
- La capa
córnea de nuestra piel se mantiene hidratada.
- Regulamos la temperatura corporal.
Además, el
sudor es inodoro: el olor se produce cuando las bacterias corporales
actúan degradándolo.
Según la dieta que
tengamos, va a influir en el tipo de olor corporal que vamos a desprender. Las
axilas a través de los ganglios, la piel, los riñones, etc son los encargados
de eliminar las toxinas de nuestros alimentos hacia fuera. Se podría decir: “Siente como hueles y sabrás cómo estás por
dentro”
El desodorante ideal debería ser capaz de controlar la sudoración sin
bloquear totalmente la transpiración natural. Los desodorantes más utilizados suelen ser
antitranspirantes, es decir, que son capaces de disminuir la cantidad de sudor.
Para poder cumplir esa función, recurren a compuestos como sales de aluminio
(clorhidrato de aluminio sobre todo), que tienen además acción
antimicrobiana frente a las bacterias implicadas en el olor corporal, de
ahí sus propiedades desodorantes.
Sabemos que el aluminio es dañino y que si
nuestro organismo no elimina toxinas de forma natural por los ganglios, toda
esa toxina queda acumulada por esa zona y va irradiando hacia la mama, etc.
LA PIEDRA DE ALUMBRE O EL DESODORANTE NATURAL
Estas piedras están compuestas a base de las
sales de origen mineral Ammonium Alum o Potassium Alum, esta última es la más
frecuente.
La piedra de alumbre es el desodorante natural por excelencia.
Se utiliza desde la época románica. Es una piedra de origen volcánico que no
sólo combate el mal olor, también tiene propiedades cicatrizantes y bactericidas
El funcionamiento es sencillo: en seco, las
piedras de alumbre se mantienen neutras, pero en contacto con el agua o la piel
húmeda y en un medio ácido (como el
sudor) el alumbre se disuelve y libera iones de aluminio.
Así se obstruyen los
poros, consiguiendo el efecto esperado en un anti transpirante.
Al ser una sal
cristalina soluble en agua, se convierte en desodorante, anti bactericida,
cicatrizante, antiséptica. Ideal para tapar pequeños cortes en la piel (al afeitarse).
No deja mancha en la ropa, es de larga duración..